La ETSID presenta una selección de proyectos de diseño de cabinas de servicios para el uso público, realizados por alumnos de Diseño Industrial.
Hacer una ciudad mejor, más inteligente y sostenible. Esta es la premisa de los trabajos de la exposición «Smart City. Diseño, Tecnología y Servicios para el uso público», que se puede contemplar hasta el próximo 2 de marzo, en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería del Diseño (ETSID) de la UPV.
Se trata de una selección de 20 proyectos realizados por estudiantes de 4º de grado en Diseño Industrial y Desarrollo de Productos, en la Mención III Diseño Productos de Uso Colectivo, que coordinan las profesoras Marina Puyuelo y Lola Merino, del Departamento de Expresión Gráfica Arquitectónica. El tema propuesto a los alumnos forma parte de una de las líneas de investigación que desarrollan en grupo de trabajo de las profesoras Puyuelo y Merino, relativa a la implementación de tecnologías en productos de uso público.
En concreto, en esta ocasión los alumnos tenían que realizar el diseño en detalle de una cabina de servicios para el espacio público, que resuelva las nuevas prestaciones y demandas del usuario actual y de modo sostenible.
Algunas de estas prestaciones están relacionadas con las nuevas tecnologías y el acceso a la información en tiempo real (cuestiones de localización y transportes, eventos, noticias, wi-fi, fotomatón, videollamadas…).
Otros servicios apuntan a la disponibilidad energética para cargar dispositivos de uso personal como tablets, ordenador y teléfono móvil, aportando nuevos formatos y posibilidades de generar la energía necesaria.
El proyecto INDURAIN de Ane Baraja, por ejemplo, permite recargar el móvil o portátil haciendo ejercicio pedaleando. Los hay que aprovechan otras fuentes de energía como es el caso del proyecto WinWor que permite el autobastecimiento de la cabina de servicios mediante placas solares. El interior de la cabina integra el uso de nuevas tecnologías que permiten al ciudadano realizar operaciones tales como llamadas telefónicas, recarga del móvil, consulta de Internet, etc, además de ofrecer información de la ciudad, de actos y eventos, al instante.
«Se trata de elementos urbanos complejos que tienen contacto directo con el usuario y requieren de cierta interactividad en tanto que han de ejecutarse una serie de acciones para su manejo y que de ellas deriva su utilidad y eficacia, según explica la profesora Marina Puyuelo.
Requieren, en consecuencia, de inmediatez de comprensión por parte del usuario. Además, como es común a otros elementos urbanos, es importante que el elemento sea resistente a las exigencias de los entornos abiertos y también a las posibles actuaciones vandálicas.
Con ese objetivo, en la muestra se propone una nueva manera de disfrutar de la ciudad, adaptándola a las necesidades actuales y gustos de los ciudadanos, pero también de una forma sostenible e integrando las nuevas tecnologías.